El Ministerio de la Presidencia, a través del Consejo Nacional para la Soberanía y Seguridad Alimentaria y Nutricional (CONASSAN), recibe el Día Nacional de la Alimentación con el compromiso de asumir la coordinación de la respuesta relacionada con la seguridad alimentaria de los dominicanos.
En este año, la efeméride encuentra el país con la realidad de que la pandemia COVID-19 impacta en las proyecciones contenidas en el estudio “El Costo de la Doble Carga de
Malnutrición” que revela que en República Dominicana uno de cada diez niños y niñas menores de 5 años tiene sobrepeso u obesidad; y uno de cada diez niños y niñas menores de 5 años aun padecen desnutrición crónica.“El citado informe fue elaborado
por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y la Comisión Económica para América
Latina y el Caribe (CEPAL) con apoyo de la Vicepresidencia de la República,
Ministerio de Salud Pública e INCAP y los datos que arroja nos mueven a
afianzar los esfuerzos que estamos asumiendo, con el fin de revertir esas
estadísticas”, expresó Rolando Peralta, secretario técnico del CONASSAN.
Dijo que, de igual manera, en el
estudio ¨Estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2020¨
elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la
Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), la
Organización Mundial de la Salud (OMS), el Programa Mundial de Alimentos (PMA),
y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), resalta que es
necesario realizar mayores esfuerzos para reducir el retraso del crecimiento
infantil y el bajo peso al nacer, pues estos ámbitos no avanzan al ritmo
esperado.
Explicó que el estudio anterior
refiere que vivir en un hogar afectado por inseguridad alimentaria es un
indicador de obesidad en niños en edad escolar, adolescentes y adultos para
países de ingreso mediano alto y alto, siendo la obesidad la epidemia que están
sufriendo aquellos países, que al igual que República Dominicana, se consideran
de ingreso mediano alto.
“Estas proyecciones no consideran
el impacto de la COVID-19, por lo que se estima que el hambre será aún más
acuciante cuando se contabilicen los efectos de la pandemia sobre la seguridad
alimentaria”, señaló Peralta.
Según FAO, preservar el acceso a
alimentos inocuos y nutritivos es, y seguirá siendo, una parte esencial de la
respuesta a la enfermedad por coronavirus (COVID-19), especialmente para los
más pobres y vulnerables del mundo, que
son los que más han sufrido el
impacto de la pandemia y que se verán más afectados por las perturbaciones
económicas derivadas.
En los esfuerzos locales tenemos
que actualmente se está culminando la conformación de la Red Nacional para la
Soberanía y Seguridad Alimentaria y Nutricional (Red SSAN), que dispone que
cada provincia y municipio tenga una mesa, dentro de sus Consejos de Desarrollo,
exclusiva para tratar temas de soberanía y seguridad alimentaria, permitiendo
así que organizaciones de la sociedad civil y representantes de la sociedad
dominicana no vinculados directamente al gobierno puedan presentar sus
necesidades para elevar los niveles de seguridad alimentaria y nutricional en
sus territorios, así como monitorear, diagnosticar, evaluar y promover los
avances de las políticas públicas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario